Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión. Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado. Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.
Hebreos 4:14-16 RVR1960
Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; Y tú perdonaste la maldad de mi pecado.
Salmos 32:5 RVR1960
La Cura Para La Sequía Resultante Del pecado
Una sola palabra: ARREPENTIMIENTO
El verdadero arrepentimiento literalmente significa, un cambio interno del corazón que se manifiesta en un cambio externo de dirección. Si no hay un cambio externo de dirección, entonces no hay un arrepentimiento verdadero.
Si, debido al pecado, está en una sequía espiritual, arrepiéntase. Si lo hace, su sequía puede terminar y podrá experimentar las bendiciones de Dios.